"El Infierno de los vivos no es algo que será; hay uno, es aquel que existe ya aquí, el infierno que habitamos todos los días, que formamos estando juntos. Dos maneras hay de no sufrirlo. La primera es fácil para muchos: aceptar el infierno y volverse parte de él hasta el punto de no verlo más. La segunda es peligrosa y exige atención y aprendizaje continuos: buscar y saber reconocer quién y qué, en medio del infierno, no es infierno, y hacerlo durar, y darle espacio".

Italo Calvino. Las ciudades invisibles.

jueves, 25 de noviembre de 2010

EN EL CAMINO


La película sigue a Luna en su descubrimiento del nuevo mundo de Amar, con quien formaba una pareja feliz, moderna y armoniosa, que disfrutaban de la vida, y muestra el doloroso cataclismo que se produce en su relación amorosa, la desintegración de una pareja. ¿A qué y hasta dónde se puede renunciar por amor?¿Es la religión la solución a los desastres de la guerra? Estas son algunas de las preguntas que la realizadora bosnia Jasmila Zbanic, realizador que se llevó el Oso de Oro en Berlín por Grbavica en 2006, plantea a través de los problemas con los que se topa Luna. La conversión de Amar es brutal, sin concesiones, totalmente seducido por una comunidad aislada del mundo y de sus problemas actuales, en un marco idílico donde se reza y donde todo adquiere un sentido, incluso la guerra. Esta nueva familia reemplaza a la que ha perdido y a la que no puede formar con Luna, ya que los hijos se resisten a llegar. De esta conversión sólo vemos lo que Luna y la cámara de Jasmila Zbani van descubriendo, y supone un precio desorbitado para Luna: el aislamiento de la sociedad, el secuestro consentido de las mujeres, un abismo de incomprensión. Están enamorados, pero su vida en pareja resulta imposible al transitar por mundos incompatibles. Luna debe afrontar la nueva situación y elegir, ya que Amar embaucado por la secta no podrá. Los dos se dirán uno a otro: “vuelve”. Los dos, como su país, en busca de su identidad.

Todas las emociones, amor, humor, perplejidad, decepción, sufrimiento, ira, determinación, pasan por el bello rostro de Zrinka Cvitesic, la magnífica actriz que interpreta a una Luna fuerte y frágil a la vez, con simplicidad y talento, inteligencia y desgarro. De la forma en que se muestra la evolución de los personajes depende el éxito de la película, y si bien en el caso de Luna está transmitido con hondura, su paso hacia el desconcierto y la perplejidad, en el caso de Amar está falto de matices y sutilezas, de modo que resulta poco verosímil la rapidez con la que adopta los modos de sus nuevos hermanos. La película, sin embargo, evita el maniqueísmo y los fundamentalistas son vistos a través de los ojos de Luna como extraños, no como futuros terroristas o locos.

viernes, 5 de noviembre de 2010

CORRESPONDENCIAS

¿Qué tienen en común Phörpa y Little Buddha?

a) El director de una fue asesor en la otra.
b) En las dos se retransmite una final de la copa del mundo de fútbol.
c) Dos niños llegan a un monasterio budista al pie del Himalaya.